jueves, 2 de mayo de 2013

ALGUNOS APUNTES SOBRE EL PRESIDENCIALISMO EN PARAGUAY



1.                  Introducción

2.                  Legitimidad Dual

3.                  Semipresidencialismo

4.                  Termino fijo

5.                  Confección de listas parlamentarias en el                           presidencialismo, influencia de las                                       listas cerradas listas abiertas

6.                  Unicameralismo, Bicameralismo

7.                  La relación de fuerzas en los arreglos              
            Constitucionales

8.                  Referencias

9.                  Bibliografía
           
Introducción

Esta síntesis tiene por objeto identificar algunos problemas que pueden surgir en el sistema presidencialista. Se realizan algunas comparaciones con el Parlamentarismo y también se expondrá sobre algunas circunstancias de hecho que afectan y/o podrían afectar a nuestro sistema presidencialista en particular, también se exponen algunas posibles soluciones a inconvenientes de hecho en nuestro sistema presidencialista y parlamentario. Además se agrega un pequeño análisis sobre la relación de fuerzas en los arreglos Constitucionales en "nuestro presidencialismo".

Legitimidad Dual

Uno de los grandes debates en los sistemas presidencialistas es cuál  de los poderes del Estado (electos por el pueblo) tiene mayor legitimidad.

Este debate se debe a las atribuciones, funciones,  los mecanismos de control y la responsabilidad por las acciones llevadas a cabo por los representantes de los poderes legislativo y ejecutivo.

En el parlamentarismo existe una sola legitimidad, que es la de los miembros del parlamento electo, en el cual el presidente o el primer ministro forma parte del parlamento y es elegido por este. Su principal mecanismo de control se realiza mediante el voto censura que implica un análisis bien minucioso, pues en caso de concretarse el voto censura al presidente o primer ministro todos los representantes del parlamento deben ser electos nuevamente si es rupturista o bien conjuntamente con el voto censura se debe presentar al candidato a ocupar la presidencia o la primera magistratura si es continuista.

En nuestro presidencialismo tenemos la legitimidad dual, pues el presidente y los miembros del parlamento son electos directamente por el pueblo y  en donde muchas atribuciones y funciones se mezclan restándole funcionalidad a la dinámica de gobernabilidad necesaria para la concreción de políticas públicas de gobierno. Nuestro principal mecanismo de control al presidente se realiza mediante el juicio político que así como se lo viene utilizando no solamente resta legitimidad al presidente electo frente al parlamento, sino que al no estar reglamentado se pervierte la función para la cual ha sido establecido convirtiéndolo  en un mecanismo de extorsión que no respeta las garantías básicas que debe tener todo individuo (incluyendo el Presidente1 y los Ministros de la Corte Suprema de Justicia2) en un proceso de cualquier naturaleza. Cabe destacar que el principal mecanismo de control del Presidente al Parlamento mediante el veto sí se encuentra bien reglamentado, pudiendo el Parlamento ratificar lo emitido con una cantidad establecida de votos y no implica la remoción de ningún parlamentario.

La falta de justo equilibrio es un gran problema que acarrea nuestro sistema presidencial con su legitimidad dual y donde las atribuciones, funciones se mezclan afectando la gobernabilidad y donde los mecanismos de participación y de control son pervertidos.

Semipresidencialismo

Bajo el semipresidencialismo, la mayor parte o todos los poderes del ejecutivo quedan en manos de un gabinete responsable exclusivamente ante el parlamento cuando el presidente carece de una mayoría confiable3.

Sin embargo uno de nuestros problemas radica en la figura de la vicepresidencia, se puede partir de que el hombre es bueno o malo, pero siempre se tiene que prever que puede obrar de manera incorrecta, por eso y teniendo en cuenta las peleas constantes que se desataron entre el vicepresidente4 y el presidente enfrascados  en el marco de una legitimidad dual, resulta evidente que  la  figura del vicepresidente debe ser mejorada.

Una solución que podría mejorar esta situación es la eliminación de la figura del vicepresidente y el nombramiento de un  funcionario (primer ministro o cualquier otra denominación) que dependa del Presidente y le rinda cuentas de las labores que ejerce como nexo con el Parlamento y de las gestiones para obtener gobernabilidad mediante acuerdos programáticos o de otra índole.

Para algunos constitucionalistas el Poder Legislativo "se ha convertido en el más importante de los tres poderes del Estado" (Mendonca). Por lo demás, se ha dicho que la Constitución tiene una tendencia parlamentarista. Lo que perdió en prerrogativas constitucionales el Presidente, lo ganó el Congreso5.

Para los partidos de oposición, conscientes del rebosamiento constitucional del poder estatal bajo su control, tampoco fue fácil, debido tanto a los prejuicios atávicos como a los coyunturales. Debieron optar entre mantener su "perfil opositor" y no cooperar con el Gobierno previendo consecuencias electorales a futuro, o aceptar el desafío histórico de apoyar desde el Congreso la institucionalización del país y la gobernabilidad democrática a expensas de un debilitamiento de su posición frente a los segmentos más duros de sus propios adherentes6.

Termino fijo

El termino fijo del mandato es particularmente pernicioso cuando el partido del presidente está en clara minoría, y es difícil para él realizar su programa. En esta situación de minoría clara, el fantasma del inmovilismo y la ingobernabilidad está siempre presente.

Además, el termino fijo crea inconvenientes a la hora de premiar a un Gobernante (especialmente si no hay relección, en nuestro caso lo envía directamente al ostracismo político) o de cambiarlo por inoperante.

Otra peculiaridad de nuestro sistema presidencial es que al estar el poder en el parlamento y la responsabilidad en el ejecutivo llega cierto momento en que todos los sectores políticos, incluido el partido que llevo al poder al presidente o una gran parte del mismo, empiezan a desprenderse y des responsabilizarse con respecto a las acciones del ejecutivo y más aún con relación al presidente. Esto se debe a que el presidente asume la responsabilidad sobre las políticas de gobierno, sin embargo el parlamento tiene mayores atribuciones que el ejecutivo, a esto hay que sumarle que el presidente va camino al ostracismo político obligatorio con la figura de Senaduría Vitalicia7 y los miembros del parlamento pueden ser reelectos sin ningún limite por consiguiente y siendo que la responsabilidad de la clase política prácticamente recae sobre el presidente y que este ya no tendrá ninguna influencia política preponderante en la gestión del gobierno próximo su figura se va degradando paulatinamente hasta alcanzar el ya mencionado ostracismo político.

Confección de listas parlamentarias en el presidencialismo, influencia de las listas cerradas y listas abiertas

Donde la disciplina es en particular débil, los legisladores de un mismo partido pueden retractarse e incumplir un pacto negociado por sus líderes partidarios. Incluso, puede ser que los presidentes no estén en condiciones de confiar ni siquiera en el apoyo de su propio partido. Bajo estas circunstancias los presidentes se ven forzados a descansar sobre bases construidas ad hoc, y tienen que negociar cada ley controvertida con los legisladores, uno por uno, en vez de negociarlas principalmente con sus líderes, quienes pueden ofrecer los votos de sus partidos. Ésta es una situación difícil para los presidentes, y alienta el uso extensivo del clientelismo y el patronazgo para asegurar el apoyo individual de los legisladores8.

Si el partido (especialmente la organización nacional del partido) controla a quien resulta electo, como ocurre en un sistema de lista cerrada en elecciones proporcionales, los políticos tienen fuertes incentivos para seguir al líder partidario; de lo contrario, arriesgan su propia ubicación en la lista del partido. Por otro lado, donde los miembros se eligen gracias a sus propios recursos y esfuerzos, como en los sistemas donde los candidatos del mismo partido tienen que competir entre sí (listas abiertas), los políticos dependen menos de su partido9.

Unicameralismo, Bicameralismo

Otra de las críticas a nuestro sistema parlamentario es la excesiva cantidad de parlamentarios para un país tan pequeño y que el bicameralismo no se sustancia con esta situación.

Nuestro sistema prevé una representación departamental para la Cámara de Diputados y una representación nacional para la Cámara de Senadores.

Cabría preguntarse, ¿dado nuestro tamaño y nuestra forma de gobierno unitaria es necesario el bicameralismo? ¿La representación nacional y departamental no se daría con un sistema unicameral con representación de todos los departamentos del país? ¿La presentación de  listas nacionales por partido no bastaría para una representación unicameral? ¿Cómo incide el sistema de control bicameral en el sistema presidencialista? ¿No sería mejor el funcionamiento de nuestro bicameralismo, así como esta establecido en nuestra Constitución, en un sistema parlamentarista? 

La relación de fuerzas en los arreglos Constitucionales

Siguiendo el razonamiento de los artículos de El Federalista10 sobre las facciones podemos concluir que el pacto fundamental de convivencia (La Constitución Nacional) debe reconocer la existencia de las más diversas facciones en la sociedad, por ende y para que una facción coyunturalmente mayoritaria no sea la que imponga sus intereses y/o punto de vista por sobre las demás facciones afectando así a la libertad de las mismas se deben presentar a la ciudadanía los artículos específicos que deberían ser reformados con su fundamentación y los artículos que serían introducidos en su sustitución. 

Llamar a una Constituyente, especialmente cuando la Constitución que quiere ser reformada no ha sido 100% lograda, sin la especificación respecto a los artículos que serían modificados, sin la divulgación de la argumentación y fundamentación de la necesidad de modificación de esos artículos con los artículos a ser introducidos en su sustitución y sin el respeto al compromiso de modificar sólo lo que se comunicó, divulgó y fundamentó podría resultar en una aventura muy peligrosa.

Referencias

1.  Caso Juicio Político a Fernando Lugo.

2. El Acuerdo y Sentencia Nº 952/09 de la Corte Suprema de Justicia que declara inconstitucionales las Resoluciones Nº 122 del 25.11.2003, y Nº 134 del 12.12.2003, dictada por la Honorable Cámara de Senadores, luego de la realización del Juicio Político a 5 Ministros de la Corte Suprema de Justicia (Caso Fernández Gadea). También la Comisión Interamericana de Derechos Humanos declaro admisible la petición en cuanto se refiere a presuntas violaciones de los derechos reconocidos en los artículos 8 y 25 de la Convención Americana, en relación con los artículos 1(1) y 2 de dicho instrumento (Caso Bonifacio Ríos Avalos).

3. Presidencialismo y Democracia, Juan Linz Linz (Una revisión crítica), Scot T. Mainwaring – Matthew S. Shugart.

4. Figura con un historial de conflictos con el Presidente en la transición democrática llegando inclusive al magnicidio (Caso Argaña) en una ocasión.  El vicepresidente posee atribuciones aparentemente ínfimas catalogándose al cargo como “florero”, pero sin embargo su atribución principal  es de suma importancia para lograr una buena relación con el Parlamento, para la gobernabilidad y para lograr acuerdos con el Parlamento sobre puntos fundamentales para el Poder Ejecutivo.

5. Presidencialismo Moderado y Gobierno de Coalición.        Emergencia y fracaso de una experiencia inédita - Myriam Yore,  Marielle Palau.

6. Presidencialismo Moderado y Gobierno de Coalición. Emergencia y fracaso de una experiencia inédita - Myriam Yore, Marielle Palau.

7.  Figura meramente ornamental de la Senaduría Vitalicia establecida en el artículo 189 de la Constitución Nacional: "Los ex presidentes de la República, electos democráticamente, serán senadores vitalicios de la Nación, salvo que hubiesen sido sometidos a juicio político y hallados culpables. No integrarán el quórum. Tendrán voz pero no voto". 

8. Presidencialismo y Democracia, Juan Linz (Una revisión crítica), Scot T. Mainwaring – Matthew S. Shugart.

9. Presidencialismo y Democracia, Juan Linz Linz (Una revisión crítica), Scot T. Mainwaring – Matthew S. Shugart.

10. Conjunto de artículos destinados a fundamentar la importancia     de la Constitución Nacional y el Sistema Federal Unitario en los  Estados Unidos, escrito por Alexander Hamilton, James Madison   y John Jay.

Bibliografía

1. Presidencialismo y Democracia, Juan Linz(Una revisión crítica), Scot T. Mainwaring – Matthew S. Shugart.

2. Presidencialismo, Sistemas Electorales y Sistemas de Partidos en América Latina, Dieter Nohlen.

3. O Federalista, Remedios republicanos para males republicanos,  Fernando Papaterra.



6. Presidencialismo Moderado y Gobierno de Coalición. Emergencia y fracaso de una experiencia inédita - Myriam Yore, Marielle Palau.


8. Anotaciones personales.


Juan Carlos Duré Bañuelos 



1 comentarios:

Éxitos amigo una verdadera herramienta para el pensamiento constructivo que tanta falta nos hace...